El presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), Romer Saucedo, encabezó este martes el acto de inauguración del Año Judicial 2025 en la ciudad de Sucre. En su discurso, anunció una justicia “independiente y amigable”, además de una mejora en el acceso digital durante su gestión.

“Hemos reconocido públicamente y en Sala Plena que debemos trabajar en algunos puntos de manera urgente, eso es lo que nos han pedido y esperan de nosotros. No podemos defraudar esa confianza”, señaló Saucedo, frente al resto de magistrados y otras autoridades en el hall del TSJ.

En el acto no participaron las máximas autoridades de los órganos Ejecutivo y Legislativo. Solo asistió el procurador general del Estado, Ricardo Condori.

Saucedo agradeció a sus colegas magistrados por su elección como presidente del TSJ y reiteró que no hubo “imposiciones ni presiones”. “Simplemente primó el consenso, la unidad, el diálogo”, apuntó.  

Reveló que uno de los acuerdos de la Sala Plena, de la que quedaron excluidos los dos magistrados prorrogados, hablaron de promover “una justicia amigable, una justicia en la que el ciudadano que tiene problemas y que tiene litigios se sienta atendido”. “Que deje de ser un martirio”, agregó.

También prometió mantener la independencia del Órgano Judicial y que “no debe estar sometida a ningún poder”; ser imparciales y solo actuar con la Constitución Política del Estado y las leyes.

Saucedo puso como ejemplo el sistema digital que emplea el Ministerio Público y anunció relaciones interinstitucionales para la transferencia de tecnología, con la finalidad de mejorar el acceso de los litigantes a las causas en el Órgano Judicial.

Finalmente, señaló que también se evaluará a los actuales vocales y jueces, debido a que existen funcionarios que hicieron un buen trabajo durante los últimos años. “No podemos decir que todo está mal”, indicó.